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miércoles, 4 de mayo de 2011

03-05-11


Hola de nuevo, hoy quiero dedicar esta entrada a mi amiga Yolanda , y a la que quiero dar ánimos para que siga con esto de la fotografía.



Eulogio es un buen amigo, fotógrafo de profesión al que podéis ver en este mismo blog en sitios interesantes. Con esta foto quiero comentar que las fotografías se hacen con la cámara, con la vista y con el corazón por lo que para dar con la instantánea que queremos a veces tenemos que adoptar posturas extrañas y sobre todo "meternos" en la foto.




Estas dos fotografías son muy parecidas y quiero que veáis como afecta el "Balance de Blancos", en la primera se ha modificado a luz incandescente y en la segunda se ha dejado en automático, dando en este segundo caso una dominante amarillenta, que en determinados casos se puede usar como efecto, mientras que en la primera ha reproducido la piedra en su color real.
Se trata de la catedral vieja de Plasencia y si os fijáis   en la nervadura central de la ultima bóveda se ve como un quiebro, mientras que en las otras se ve recto, pues bien el famoso terremoto de Lisboa que afecto a Cádiz, también dejo aquí su huella.       


En esta fotografía pretendo que veáis lo que es la profundidad de campo, y se puede apreciar como la reja y la piedra que están en primer término, se encuentran tan enfocadas como el fondo. Esto se consigue con una velocidad muy baja y cerrando mucho el diafragma. En situaciones como esta, que se trata de un interior aunque iluminado y un día nublado tenemos que buscar un buen punto de apoyo para que no nos salga movida, ya que la cámara nos va ha pedir una velocidad muy baja. 
La he titulado Desequilibrio, porque aunque la foto esta visualmente equilibrada, desde un punto de vista anímico me desequilibra, la reja con sus puntas afiladas rompe la tranquilidad que aparentemente se respira en el claustro.


Es el mismo claustro de la catedral de Plasencia y es como si en el siglo que se termino de construir hubiera habido posibilidades de tener una cámara como las actuales y haber fotografiado este rincón, de no ser por el cepillo que estropea el encanto de la escena. El ocre antiguo de las piedras se renueva con el verde brillante del musgo y las plantas.
Esto quiere decir que hay que cuidar los detalles y que no se nos escapen.




Esta otra foto también es de las complejas, y os he puesto la original y la "revelada", como yo digo, con el programa famoso Photoshop, y del que no hay que abusar como todo en la vida. En este caso he reencuadrado la foto para usar la parte mas oscura como marco, equilibrando en todo lo posible la luz exterior con la embocadura de los arcos, ya que hay muchos diafragmas de diferencia entre las dos zonas. Esto se habría podido arreglar tambien con un buen disparo de flash para iluminar la zona oscura, pero creo que habría perdido mucho encanto y habriamos molestado al fotógrafo.



Es el mismo claustro en el que se respira, paz, quietud, sosiego y se escucha el silencio, cosa dificil en nuestros días y con el estres que llevamos.  Es una fotografía con una luz cenital, sin sombras y que no nos crea demasiados problemas a la hora de fotografiar la escena, aunque hay que equilibrar las zonas de luces y sombras.


La plaza mayor de Plasencia, una tarde tranquila,  apacible y de buen tiempo, aparentemente, porque aunque aparece un cielo seminublado con grandes claros, la realidad es que era un día cerrado y a punto de llover, lo delata algún paraguas al fondo y el que no haya sombras en el suelo. Licencias que nos tomamos los fotógrafos.  

Intento, con estas fotos de hoy, que os fijeis en las fotografías y en sus detalles porque todas nos cuentan cosas, y nos transmiten sensaciones. 


2 comentarios:

  1. Enhorabuena a Yolanda!! unas fotos muy bonitas y que estoy totalmente de acuerdo contigo en lo que dices, que todas nos trasmiten algo, aunque ayuda bastantes tus comentarios, por supuesto.

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  2. Muy buenas fotos... Desde aquel viaje, ando con las lumbares fastidiadas.. jajaj. Un abrazo.

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